Una vez un halcón que se posó en el nido de un ruiseñor, y este le rogó que no hiciera daño a sus hijos, este le respondió que si le cantaba bien y si a él le gustaba no les haría daño el ruiseñor convencido por la palabra del halcón le comenzó a cantar.
El halcón le dijo: que no le gustaba como cantaba, entonces cogió a un hijo del pequeño ruiseñor y se lo comió. Entonces en aquel momento llego un cazador, monto un lazo alrededor del halcón, y cuando estaba distraído el halcón lo cogió fácilmente.
Moraleja de: el halcón y el ruiseñor
La moraleja de esta fábula de Esopo, nos recuerda que si tenemos enemigos no debemos descuidarnos.
3 Comments
Que padre pero no lo encontraba asta que un amigo que se llama Mauricio me llamo y me dijo que hiciera un comentario.
Pero como lo modero
muchas grasias eso me ayuda para mi tarea eres increible que bien que la publicaste✌